A mitad de la semana

El gran fallo de MORENA

Ya sabemos que quien decide cada uno de los pasos políticos que hace MORENA como partido y como movimiento de participación ciudadana, es Andrés Manuel López Obrador, esta situación ha hecho que se cometan numerosos errores generados por la miopía de una sola visión, que pudieron subsanarse por una visión global. A pesar de ello estos errores como las numerosas declaraciones desafortunadas de AMLO, han sido subsanados por el carisma y la simpatía con las que cuenta el presidente por encima de cualquier opinión contraria del colectivo.

Hoy todo el aparato político de MORENA empieza una búsqueda de un error escandaloso y dramático que señale como una persona “anti” principios a Xóchitl Gálvez, con la única intención de que sea presentada como una mala opción para ser electa como presidente en los próximos comicios a celebrarse el siguiente año 2024, ya que se vislumbra ganadora ante Claudia.

Primero se intentó generar en la opinión pública la idea de que Xóchitl no era indígena, a lo cual ella contestó que si bien no lo cacarea, se ostenta como tal y mostró una foto de las circunstancia en las condiciones que vivía de niña. Después dijeron que los contratos que ha tenido son millonarios por un robo al erario, de lo cual no se pudo comprobar que se tuviera un elemento ilegal o ilegítimo. Posteriormente se agregó que su residencia estaba “chueca” con papeles que no se encontraban en regla, a lo cual ella contestó que fue comprada a crédito con el banco y que los papeles estaban en regla, sin embargo se arremetió y se mencionó que debería demolerse por no contar con el uso de suelo antes de empezar la construcción, pero tal documento impediría la lotificación y no la venta, por lo que la multa sería en la constructora y no en Xóchitl; inclusive una vez derrotado el argumento los morenistas se quejaron de que Xóchitl se estaba poniendo como víctima porque en realidad no se estaba pidiendo su demolición, a pesar de que unos días antes se emitió un comunicado donde se pedía justamente eso, es decir un desajuste organizacional notable ya que se pedía desde MORENA la demolición de manera escrita.

Ahora están circulando en redes sociales fotos de los vestidos que usa Xóchitl Gálvez criticando los “costosos” que cuestan y que no son hechos por manos indígenas, los cuales fluctúan en unos “groseros” $1,500 a $3,500 pesos, lo cual no expone nada, puesto que ella ni ha dicho que todos sus vestidos son artesanales y además, es un artículo de primera necesidad y el costo es francamente mucho menor de por ejemplo los accesorios como el reloj que tiene Adán Augusto de más de 100 mil pesos.

MORENA se está metiendo en un juego que en su momento el PRI y el PAN no quisieron jugar, porque al no ser atinados los ataques, empiezan a dibujar como mártir a Xóchitl, lo cual hace que mejore su aceptación y su popularidad, puesto de lo que justamente se queja MORENA, es lo que tiene adentro; y lo que anhela es lo que tiene Xóchitl dentro de sus características.

Claudia Sheinbaum representa una candidata fiel pero incorrecta a lo estipulado por AMLO, porque pertenece a una élite con orígenes extranjeros, que ha vivido de becas en el extranjero, donde aprendió a robar con los neoliberales y que es candidata entre denuncias de corrupción y dedazo.

Xóchitl por su parte es una mujer con orígenes mucho más humildes, emanada de la población, o por lo menos, no de los partidos y que surgió de un procedimiento altamente democrático (no al 100%), pero sí más legítimo que el de MORENA.

Parece que todo lo que ha dicho y señalado AMLO le viene de regreso cuando más lo necesitaba, justo en la sucesión del poder. Xóchitl deberá aguantar las embestidas desde Palacio sin salirse de sus casillas y Claudia necesita inyectar dinamismo e ímpetu en sus discursos, aunque no tiene mucho para a donde moverse, puesto que le apostó a ser copia de AMLO, ganó el dedazo y ahora el discurso de justificación de errores de AMLO y discursos calca, se agotan rápidamente.